Lo que alguna vez fue una trocha fangosa en medio de la montaña, hoy es una de las vías más emblemáticas de Medellín. La Avenida Las Palmas, cuyo nombre proviene de las palmas que crecían entre la vegetación del lugar, ha acompañado la transformación de la ciudad desde el siglo XIX hasta convertirse en un corredor verde, símbolo de desarrollo, movilidad y belleza natural. Este corredor refleja cómo Medellín ha sabido evolucionar sin perder la conexión con su historia y su entorno.
Hoy, Las Palmas es mucho más que una vía de acceso: es un jardín urbano que recibe a miles de visitantes y habitantes cada día. Esta avenida abarca un área verde de más de 7.200 m2, de los cuales 3.367m2 corresponden a intervenciones paisajísticas ejecutadas en 2024 distribuidas estratégicamente por tramos desde la glorieta de San Diego hasta el retorno N.° 6. Este espacio combina biodiversidad y paisajismo para crear una experiencia visual única, que embellece la entrada oriental de la ciudad y ofrece un respiro verde en medio del entorno urbano.
En estos tramos se establecieron 27.362 plantas de jardín de 21 especies diferentes, entre ellas Lavanda, Agave, Calatea tricolor, Helecho Boston, Lirio amarillo, Margarita amarilla, Heliconias, entre otras, que llenan de color y vida el recorrido. Además, se encuentran establecidas 15 especies de palmas, para un total de 561 individuos. La palma más representativa del corredor es la Syagrus sancona, con 148 individuos, un dato que resalta la diversidad y el valor ecológico del lugar.
Este corredor verde es intervenido por el Distrito de Medellín, que reafirma su compromiso con el cuidado, y la sostenibilidad del territorio. Las Palmas es hoy un ejemplo de cómo la infraestructura y la naturaleza pueden convivir en armonía, recordándonos que Medellín sigue creciendo y transformándose sin perder su esencia verde y su apuesta por una ciudad más amable y consciente con el medio ambiente.
