La ciudad continúa consolidándose como referente en sostenibilidad urbana gracias a la implementación de infraestructura verde alternativa, una estrategia que integra la naturaleza en el espacio público para mejorar la calidad de vida y promover la biodiversidad. Esta apuesta busca transformar el entorno urbano con soluciones innovadoras que generan beneficios ambientales, sociales y estéticos.
Entre las intervenciones más destacadas se encuentran los ocho árboles metálicos instalados en puntos estratégicos de la ciudad, que se cubren con enredaderas como la tunbergia azul para brindar sombra y hábitat a distintas especies. A ellos se suma una pérgola urbana en Carabobo Norte, diseñada con follaje de tunbergia morada y equipada con bancas y mesas que favorecen la apropiación ciudadana de los espacios públicos.
En la ciudad también se han incorporado muros verdes y materas ornamentales que embellecen el paisaje, purifican el aire y regulan la temperatura en zonas de alto flujo peatonal. Uno de los íconos de esta estrategia es el tótem de San Diego, un muro verde que reúne más de 2.490 plantas en 130 m², consolidándose como un símbolo de la riqueza natural de Medellín. Estas iniciativas se complementan con los puentes verdes, que no solo conectan espacios urbanos, sino que también favorecen la conectividad ecológica.
Hoy Medellín invita a sus ciudadanos a cuidar, recorrer y disfrutar estas transformaciones. Porque cada hoja, cada flor y cada muro cubierto de verde son prueba de que juntos estamos construyendo una ciudad más sostenible, resiliente, verde y llena de esperanza.